No hay dos embarazos iguales, te dicen cuando te quedas embarazada por segunda vez. ¡Y qué razón tenían quienes me lo dijeron!
El embarazo del Pitufo fue perfecto. Durante los 10 meses (que sí, que son 10; lo de los nueve meses es una de las dos grandes mentiras sobre el embarazo) yo no me explicaba por qué las embarazadas protestaban tanto... Pensaba que eran unas exageradas, que no era para tanto... Pero entendedme.
No tuve ni una naúsea, ni un dolor, ni una mala gana. Excepto el sueño del primer trimestre, además, estuve todo el embarazo llena de energía.
Adelgacé durante el embarazo. No de peso, claro. Pesaba más. Pero sólo engordó la tripa. Las piernas, las caderas, los brazos, la cara, el culo... todo adelgazó.
Estaba guapísima. Y no lo digo sólo yo. Tenía la piel mucho más suave, el pelo más voluminoso (y eso que de normal no me puedo quejar del pelo, lo tengo abundante y liso, que no lacio) y el haber adelgazado contribuyó también a la belleza.
Con todo esto... ¿cómo no decir que fue un embarazo perfecto? ¡El estado ideal! Así que, además de tener ganas de tener un segundo hijo, yo de lo que tenía ganas era de estar otra vez embarazada... Error.
Que no es que no me vaya bien en este, que va todo bien. Tampoco he tenido naúseas ni malas ganas, ni ningún problema serio. Pero las diferencias ya se notaron al principio...
Empecé engordando más de lo recomendable (y de lo deseable). A esto se sumó que me salieron muchísimos granos, y que no me veo guapa. Me veo más bien feota (y eso que ahora que he dejado de engordar tanto me he reconciliado un poco con mi imagen).
Estoy cansada todo el día, no logro encontrar las fuerzas para todo... y cuando las encuentro luego me siento morir de cansancio cuando me siento. Esto, sumado al dolor de la sacroileitis que me vino al principio del embarazo hace que no haga nada de ejercicio, en el otro me pegaba unas caminatas de una hora que me sentaban de fábula.
Además no tengo tiempo para pensar en que estoy embarazada y de lo que eso implica. Y así me va. A dos meses del parto y sin nada preparado. Y cuando digo nada, me refiero a nada. Y mi madre nerviosita perdida ya de pensarlo. Y con los fines de semana hasta mitad de junio ocupados.
A este paso cuando salga la Polvorilla la tengo que meter en una caja de cartón y taparla con un trapillo... ¡Qué vida más perra!
¡Nos leemos!
Jajajajaja ya sabes que dicen "espi-NIÑA" aunque en mi caso con Critter me puse guapota y hermosa y regordota así que seguro con el niño me pasará lo que a ti.
ResponderEliminarNormal que te quejes...no es lo mismo sólo preocuparte de tú embarazo que tener a otro pitufo que cuidar...
Y la edad amiga mía ¡la edad! ya se nos nota jajaja
Un besote desmadroso y QUÉJATE que eso libera
Ya me lo dijiste, ya. Antes de saber que era niña. ¡No sabes lo que me acuerdo de ti, porque no lo había oído nunca!
EliminarLa edad... ¡si supieras que lo que más me preocupa de la edad es la recuperación más que el cansancio! Y no la recuperación física, qué va... ¡la de la figura!
Un besote, hermosa. Me quejaré, pero intentaré que sea menos. Que a mí lo que me gusta es que os acordéis de mí al sonreír.
Si va a ser verdad lo de que las niñas te chupan la belleza... Seguro que exageras y te ves peor de lo que es.
ResponderEliminarLos primeros embarazos, malos o buenos se viven más tranquilos, te puedes dedicar más a ti misma. A descansar, a preparar las cosas, a pasear.. Con un niño al que cuidar eso está ya complicado.
Ánimo que ya queda poquito
Bueno, en realidad eso dice mi marido... Y eso sí, ahora me empiezo a ver mejor. Pero te juro que hubo un momento en el que mi madre (¡mi propia madre!) me dijo "hombre, ya empiezas a estar más guapilla". Así que figúrate...
EliminarNo queda nada... ¡y la casa sin barrer! Ya puedo empezar a planificar compras.
¡¡Besotes!!
Jajaja, hija, el cansancio del segundo embarazo se debe a que tienes un Pitufo que sigue requiriendo todo tu tiempo, no es lo mismo embarazarse con un niño de 2-3 años, que cuando ya tiene 7-8 años. Apenas se disfruta del segundo embarazo, se engorda mucho más, ya sabes las carnes ya saben que tienen que estirarse, pero es igual de emocionante e ilusionante. Y seguro que estás guapísima, no seas quejica :p
ResponderEliminarVenga, vale, intentaré no serlo...
EliminarLo de las carnes... ¡qué gran verdad! Tripa desde el minuto uno, qué barbaridad.
Jajajaja, entonces contigo si que se da como verídico lo de que si es niño la mujer está más guapa y si es niña la belleza se la roba la niña, jajajaja.
ResponderEliminarYo en mi embarazo las nauseas vinieron en último momento, y lo de cansada era algo contínuo, pero eso si no tuve espinillas, y el pelo era una maravilla, yo cuando veo las fotos de preñada me veo más guapa que ahora... así que conmigo creo que ese dicho no se cumplió jajajaja
BESAZOS BICHEJOS ENORMES ATLETA!!!
Y no lo digo sólo yo, que me lo dicen los demás... O_o (¡cómo estaré!)
EliminarYo cuando veo las fotos del otro embarazo me veo guapísima. En este ni me he hecho. No digo más.
¡¡Besazos!!
Pues yo estoy un poco como tu!!! Desde que sé que estoy embarazada no puedo mirarme al espejo xq me veo horrible. No se que me pasa pero no encuentro el peinado adecuado, me veo fea me haga lo k me haga. Incluso maquillada. Hay dias k ni ganas tengo de salir de casa... Xo supongo k algo k ver tendran las hormonas xq mi marido me dice k me ve igual! No se... Un besazo guapa. Tequeda ya muy poquito xa ver a tu peque!!
ResponderEliminarEl mío ya ni me dice que me ve igual. Sólo me dice que está deseando que llegue la fecha de parto porque sabe que no estoy disfrutando este embarazo como el otro... no digo más.
Eliminar¡Enhorabuena por el tuyo! ¿Para cuándo te toca?