¡Ya estoy aquí!

Bueno, pues eso, que ya estoy aquí... 


Llevaba tiempo dándole vueltas a escribir un blog y hoy, por fin, me he decidido. Por cierto que ¿a todo el mundo le pasa como a mí? Quiero decir, si tienes un blog, ¿por qué lo has abierto? ¿Tenías mucho que contar y decidiste canalizarlo? ¿Te apetecía abrir un blog sólo por abrirlo y un buen día te vino la inspiración de sobre qué hablar y lo abriste? ¿Contabas cosas muy graciosas a tus amigos y te dijeron que eso merecía que lo supiera todo el mundo? ¿Fue antes el huevo o la gallina?

En mi caso, que no se diga que lanzo la piedra y escondo la mano, tenía ganas de abrir un blog. Así, porque sí. Por puro afán de exhibicionismo, supongo. Hace tiempo, cuando preparaba mi boda, ya lo intenté al alimón con mi Santo Esposo, y como soy una inconstante el proyecto se fue por la borda. Con una única entrada. Ahí queda eso.


Más adelante descubrí el Reader, y con él muchos de los blogs que veis en mi blogroll, unos me llevaron a otros, y si siguiera creo que tendría una lista mucho más grande (la de mi Reader es mayor, pero he elegido mi Top Ten, o Top Fifteen o Sixteen, no estoy segura, imprescindibles para mí, en cualquier caso). Así que ahora además me empuja una necesidad de sentimiento de pertenencia al grupo, que esto de ser madre tuitera follower de muchas madres blogeras al final hace que te sientas un bicho raro si no tienes blog.

Total, que ¿por qué he elegido ser la runnermami? Por dos razones, a saber:

Lo primero y principal es que desde que soy madre voy corriendo a todos sitios. Dentro de todos los cambios que me ha dado la maternidad, creo que este es el que menos me gusta. Yo era muy tranquila. Y llegaba siempre pronto. Ahora voy corriendo, y tarde. Y muchas veces con la mitad de las cosas sin hacer. Así que desde que soy mami soy runner.

Y el otro motivo por el que me he decidido por este nombre que me he planteado un reto. Uno de runner de los de verdad, no metafórico. El reto es hacer el recorrido de 10k de la maratón de Zaragoza el 30 de septiembre.


Los que me conocen estarán alucinando, y no me extraña. Yo soy de las que siempre ha dicho "correr es de cobardes" "yo no corro ni a por el autobús" "a mí es que correr me lo prohibe mi religión" y demás lindezas varias que sigo pensando en mi fuero interno, pero me tengo que callar. Para que los que no me conocéis os hagáis una idea de mi estado de forma sólo os contaré que el primer día que salí a correr hice 25 minutos de ejercicio, en series de 2 min. andando y 2 min. de lo que yo llamo correr, y llegué con el estómago vuelto de revés.


¿Que cómo me embarco en semejante aventura entonces? Fácil. A mi Santo Esposo. le gusta correr. Siempre le ha gustado, pero como realizaba otras prácticas deportivas no lo hacía mucho. Este año ha pasado de ser jugador a ser entrenador, así que ya no hacía tanto deporte. Y para compensar esta falta de ejercicio, cogió las zapatillas y se echó a la calle (qué mal suena eso). Hace unos meses empezaron a anunciar aquí en Zgz una carrera de 10k que lleva ya unos años celebrándose, y se lanzó a apuntarse y correr. El Pq y yo fuimos a verle, y la verdad es que el ambiente era increíble. No os preocupéis, que si seguís leyendo llegaréis al mello de la cuestión. Durante la carrera le dieron publicidad de la Maratón de Zgz, otro clásico. Hay recorrido de 10k y decidió apuntarse también. Y aquí viene la parte que me toca. Me dijo que le gustaría que corriera con él. Yo por S.E. haría cualquier cosa, excepto eso... hasta que me dijo "bueno, claro, igual no podrías". Creo que sabía lo que hacía. Ya sabéis, a mí "NADIE... ME LLAMA... GALLINA..." (aunque hago unos disfraces de gallina ganadores de anti-sorteos y todo). Y así empezó todo.

Recordad, la carrera es en septiembre. En junio decidí que me apuntaría. Me compré las zapatillas y he salido a correr... 3 veces. Así que visto el panorama, he modificado las expectativas. Que una es chula pero no tonta.

Reto modificado: la San Silvestre (5k aprox.) en diciembre (obviamente) y la 10k de junio del año que viene. Yo creo que a esto llego. Ay, no perdón, que se supone que estoy entusiasmada... ¡¡A ESTO LLEGO!!

Total, que he pensado que si voy viendo por escrito las excusas que me pongo para no salir a correr, igual hasta me da vergüenza y salgo más. Así que no es un blog de maternidad al uso, ya que voy a hablar sólo de mis experiencias como madre, pero tampoco es un blog en el que vaya a hablar sólo de mi preparación para la carrera. Más que nada porque no creo que ninguna de las dos cosas me de para mucho, aunque visto lo que me enrollo cuando pongo a escribir, igual entre las experiencias como madre, las de runner y alguna cosilla más que seguro que cae, igual tendría que escribir no uno, sino dos o tres blogs.

Tampoco me planteo hacer una entrada diaria, ni semanal, ni nada de eso. Que una es inconstante y lo sabe. Y tengo más pruebas además del blog de una única entrada, como una mantita de bebé que llevo haciendo para una amiga desde aproximadamente 3 meses antes de que me dijera que estaba embarazada y que está sin terminar aún (y sale de cuentas en octubre). Oye, que yo las cosas las cojo con fuerza, pero luego me desinflo. Y las vuelvo a coger y las vuelvo a dejar... Os estoy advirtiendo, ¿eh? Que luego no me venga nadie con el libro de reclamaciones.


A los (pocos) que hayan llegado hasta aquí les cuento el tercer motivo del runnermami: iba a poner mamá corredora, pero lo de "corredora" de repente pensé que igual me traía visitantes que buscaran otro tipo de cosas...